“Nos encontramos en un periodo de desarrollo tecnológico histórico” 

Hablamos con Sergi Artigas, director de Estrategia en Innovación en el Centro Tecnológico Leitat y Alumni de Euncet Business School, sobre el papel de la innovación y de las nuevas tecnologías a las empresas en la Revista Alumni 17.

Es habitual oír hablar de innovación, pero, para un experto como tú, ¿qué es la innovación?

Una visión muy próxima a la realidad de la innovación es considerarla como la integración de conocimiento en una actividad. Puede ser un modelo de negocio diferente, puede ser la adopción de una o varias tecnologías, puede ser el desarrollo de una idea… Pero hasta que no se integra en una actividad, no se materializa la innovación.

¿Las empresas son conscientes de la importancia de innovar o solo se recuerdan en contextos convulsos?

El más importante es que las empresas son conscientes que formen parte de un ecosistema de innovación en el que convivimos diferentes agentes con diferentes roles. 

Esta visión del entorno lleva implícito asumir que las capacidades de cada cual son finitas y que puede haber otros actores y agentes del ecosistema que complementen estas capacidades y permitan desarrollar los proyectos de innovación con éxito. Innovar forma parte de la estrategia de las empresas como una palanca de competitividad muy relevante, porque genera modelos de actividad y de negocio sostenibles a largo plazo.  

Es también trabajo de cada uno de los miembros de este ecosistema difundir la innovación como cultura empresarial y emprendedora. 

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Según datos del INE, Cataluña mantiene el liderazgo en número de empresas innovadoras del Estado. ¿Qué factores lo explican? ¿Estamos lejos de Europa?

En Cataluña, hay un factor singular muy relevante que afecta en el posicionamiento en innovación y es el alto grado de multisectorialidad existente. 

La dispersión de sectores hace que la capacidad de resiliencia frente a cambios coyunturales sea muy elevada. A este fenómeno se le tiene que añadir el impulso de diferentes vectores tecnológicos, en los que el mundo físico y el virtual se han juntado. 

La capacidad de adopción tecnológica permite el potencial necesario para que las empresas catalanas puedan ir recortando distancias con las mejores posiciones europeas.

En Leitat siempre habéis apostado por el modelo “Open Innovation”. ¿Qué ventajas e inconvenientes tiene este modelo?

La innovación abierta es una estrategia de innovación que va más allá de los límites de cada organización y donde la clave es la cooperación con actores y profesionales externos. No es excluyente con modelos de innovación totalmente internos a la organización, sino que es una manera de acometer proyectos y de resolver retos que, como ventaja principal, tiene los resultados que da el tener acceso a nuevos mercados, el incorporar tecnologías innovadoras y, en definitiva, el permitir que un mayor número de ideas lleguen a materializarse. Es un modelo que, más que inconvenientes, presenta la dificultad de ponerlo en práctica, de hacerlo extensivo a toda la organización, de ejecutar las ideas y que no queden solo como esto: ideas.

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En esta línea, habéis impulsado el DFactory Barcelona para que sea el centro de innovación de la industria 4.0 más grande del sur de Europa. ¿Qué balance hacéis de los primeros meses?

Leitat ha ubicado en este espacio los laboratorios de fabricación aditiva (impresión 3D y otras tecnologías aditivas), robótica, sensórica, fotónica, Internet of Things e inteligencia artificial. Cada tecnología y cada laboratorio necesita unas condiciones de entorno que hacen que la ubicación sea la idónea. 

Por ejemplo, las tecnologías y las soluciones que desarrollamos en el ámbito clínico o químico no serían posibles en aquel espacio. El balance es muy satisfactorio porque nos permite un entorno de desarrollo tecnológico idóneo y, a la vez, una proximidad con empresas, tanto ofertantes como demandantes de tecnología.

Allí habéis trasladado el IAM 3D HUB, otra iniciativa vuestra, junto con otras empresas. ¿Qué os ha aportado el cambio de ubicación? ¿Llegáis mejor a las empresas?

Desarrollar tecnología por sí solo no es suficiente para generar actividad y bienestar, hace falta que esta tecnología se dé a conocer y que se den y se impulsen las condiciones necesarias para adoptarla e integrarla en los procesos productivos. 

El IAM 3D HUB está concebido con esta finalidad y lleva ya unos años consiguiéndolo con éxito. La ubicación es un factor más del éxito del proyecto, pero no es el único y se tiene que tener en cuenta el esfuerzo de las personas implicadas en este proceso de adopción tecnológica. Sin embargo, al formar parte del ecosistema del DFactory, efectivamente ganamos visibilidad y proximidad con diferentes empresas vinculadas a las tecnologías 4.0, que ven en la impresión 3D una herramienta de producción imprescindible.

En cuanto a la impresión 3D, ¿en qué situación está? ¿Estamos aprovechando todo su potencial?

En el ámbito de las tecnologías de fabricación aditiva y la impresión 3D, estamos viviendo un fenómeno ilusionante e interesante que es la adopción de esta tecnología por parte del mercado. Una tecnología como la impresión 3D no avanza por sí sola, está relacionada con el impulso y el desarrollo tecnológico de otros muchos sectores y actividades. Intervienen la industria del diseño, del software, de las materias primas, de los propios procesos productivos y las diferentes tecnologías de fabricación, de los procesos de acabado y post-producción, de la medida y metrología de las piezas obtenidas… Esta diversidad hace que las iniciativas emprendedoras sean muchas y variadas. El campo que queda para recorrer es enorme, porque nos encontramos en las fases iniciales de adopción y, por lo tanto, vemos el futuro con mucho optimismo.

¿La impresión 3D puede cambiar el modelo de producción y favorecer la producción local?

Lo puede cambiar… y lo está cambiando. Es un tipo de tecnología ideal para cubrir dos necesidades que demandan todos los mercados: inmediatez y personalización. A estos dos aspectos ya le podemos añadir la capacidad de imprimir en lotes de dimensiones significativas. Si a esto, le sumamos que las condiciones de entorno para poder utilizar este tipo de impresoras son muy sencillas, efectivamente estamos ante un potencial favorecimiento de la producción local.

Aparte de la impresión 3D, ¿qué tecnologías marcarán la sociedad en un futuro próximo?

La sensórica, la bioquímica, la robótica, la inteligencia artificial, la simulación, el Big Data, las técnicas en medicina regenerativa… Nos encontramos en un periodo de desarrollo tecnológico histórico. Estas y otras tecnologías son las que marcarán el futuro y hay que desarrollarlas y adoptarlas siempre teniendo presentes tres requisitos indispensables. En primer lugar, la tecnología tiene que estar al servicio de las personas, si no, dejan de tener sentido. En segundo lugar, tenemos que desarrollar y adoptar tecnología teniendo en cuenta los límites de nuestro planeta. En tercer lugar, las tecnologías tienen que servir para generar modelos económicos y de actividad capaces de ser bastante flexibles y adaptativos a los cambios de entorno que viviremos.