Las principales diferencias entre leasing y renting,, conceptos claves para tu emprendimiento.
Array ( [image] => Las principales diferencias entre leasing y renting,, conceptos claves para tu emprendimiento. [tags] => Array ( [img] => Array ( [data-srcset] => 1 [data-src] => 1 [srcset] => 1 [sizes] => 1 [src] => 1 [class] => 1 [alt] => 1 [width] => 1 [height] => 1 ) [noscript] => Array ( ) ) )

¿Cuáles son las principales diferencias entre leasing y renting?

¿Leasing? ¿Renting? Estos conceptos se están convirtiendo en las palabras del momento para las pymes. Aunque en muchas ocasiones son confundidas, es importante saber que no son exactamente lo mismo, pese a ser ambas opciones de financiamiento tanto para vehículos como para equipo tecnológico, maquinarias o inmuebles.

Te puede interesar: Consejos para el control de gestión financiera en época de crisis, webinar a cargo de Noèlia Hurtado

En el siguiente artículo te damos las claves para que seas capaz de reconocer las diferencias entre leasing y renting y utilizar la más adecuada para tu modelo de negocio. 

Definición de leasing y renting

Se entiende por leasing aquel contrato de arrendamiento financiero mediante el cual un cliente paga un alquiler a largo plazo a una entidad más unos intereses con la opción de compra al finalizar el contrato. 

Te puede interesar: ¿Cómo definir, interpretar y analizar la economía de una empresa?

En el caso del renting, consiste en un contrato de arrendamiento mercantil con el que a través de una cuota mensual el cliente accede al uso del bien, y en el que en muchas ocasiones también se le incluyen otros servicios adicionales y sus gastos derivados, por ejemplo, el servicio de mantenimiento. 

Leasing y renting, ¿Qué similitudes hay?

Tanto el renting como el leasing son dos formas de alquiler para utilizar bienes nuevos como puede ser un vehículo, equipos tecnológicos, maquinarias o inmuebles. Ambas modalidades cuentan con una cuota periódica fijada en un contrato. Además, ofrecen ventajas fiscales siempre y cuando su uso sea exclusivamente para una actividad económica de una empresa o un autónomo. 

Te puede interesar: Decálogo para ser un buen financiero

Principales diferencias entre leasing y renting

Pese a que en muchas ocasiones estos términos generan confusión, es más la diferencia que la similitud lo que une estos dos términos. A continuación te mostramos las principales diferencias entre el renting y el leasing: 

  • Tipo de contrato. El contrato de leasing es un contrato de arrendamiento financiero, mientras que el contrato de renting es un contrato de arrendamiento mercantil.
  • A quién se dirige. Las pymes pueden acceder a ambas modalidades de financiación, mientras que los particulares únicamente pueden solicitar el renting. 
  • Duración de contratos. El renting tiene una duración inferior que puede ir desde un mes hasta 12, 24 meses e incluso hasta los 4 años si se trata de un renting de larga duración, mientras que en el caso del leasing los contratos son de larga duración (entre 2 y 6 años).
  • Contabilidad. Respecto a la fiscalidad y desgravación de impuestos, ambas modalidades funcionan de diferente manera. El renting es un arrendamiento que puede deducirse como gasto, mientras que el leasing es un sistema de financiación por lo que se incluye en el activo inmovilizado.
  • Propiedad. Otra de las diferencias entre el leasing y el renting es que con el primero las cuotas engloban el precio total del vehículo y puede ser comprado al finalizar el contrato, mientras que el renting cede el derecho de uso al arrendatario y puede ser renovado, ampliado con las mismas condiciones u optar por un nuevo bien, e incluso devolverlo.
  • Legislación. El leasing es un contrato regulado por la Ley 26/1988 y por ello intervienen entidades financieras acreditadas. En cambio, el renting puede ser firmado con una empresa privada en calidad de operación mercantil. No requiere ninguna financiera. 
  • Costes. En el modelo de renting, es la empresa de renting la encargada de proporcionar el bien y la que se hace cargo de los costes relacionados. El cliente únicamente debe abonar la cuota mensual pactada. En el caso del leasing el cliente debe asumir todos los riesgos, derechos y obligaciones del bien como si fuera de su propiedad.

¿Cuál es más conveniente?

Posiblemente esta sea la pregunta del millón. Si eres un particular, la respuesta es sencilla: el renting. En cambio, si eres una pyme influyen otros factores a la hora de decidir por qué modalidad decantarse.

Se recomienda optar por el renting siempre y cuando no se disponga de mucho capital y el tiempo de uso sea a corto plazo, ya que dentro de la cuota se incluye todo tipo de gastos de mantenimiento asociados al bien en cuestión. También es una buena opción cuando se tiene la intención de cambiar o renovar los equipos cada dos o tres años. 

Te puede interesar: EBITDA y EBITDAC: qué es y qué impacto tiene en la empresa

Se aconseja el leasing para aquellos casos en los que la empresa requiera utilizar los bienes a largo plazo y se tenga pensado amortizarlos. Además, en cuanto al impacto en el impuesto de sociedades, con este método de alquiler las empresas pueden obtener deducciones fiscales al considerarse un gasto de la empresa.

Si quieres saber más sobre otros conceptos financieros no te puedes perder el posgrado en Dirección Financiera de Euncet Business School