Tras la globalización, las estrategias de internacionalización de las empresas han ido en aumento con la llegada de las empresas multinacionales y las economías de escala.
Con la evolución de los mercado se han abierto nuevos modelos de negocio que están explotando el mercado exterior con nuevas propuestas de valor.
En el siguiente artículo, te explicamos qué tipos de estrategias de internacionalización existen y casos de éxito.
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¿Qué es la internacionalización de una empresa?
En muchas ocasiones, la internacionalización es confundida con la globalización. Aunque estos términos no hagan referencia exactamente a lo mismo, es normal que se confundan, ya que la internacionalización de la empresa no deja de ser la aplicación de la globalización.
Ahora bien, ¿qué entendemos por internacionalización? Es el proceso con el que una empresa desarrolla su actividad en otro país distinto al de origen, es decir, en el mercado extranjero.
Así pues, la internacionalización de una empresa es una estrategia transnacional con la que expandir su capacidad productiva para llegar al mercado global. Entre sus principales objetivos destaca la potenciación de la marca, el aumento de la capacidad productiva, la expansión de mercados y la generación de riqueza colectiva aprovechando los recursos que ofrece la región.
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Etapas de la internacionalización de una empresa
Pese a que el proceso de internacionalización de una empresa puede variar dependiendo de su tamaño, actividad, sector y país, existen fases recurrentes:
Etapa importadora
Antes de lanzarse a experimentar en nuevos mercados, la mayoría de las empresas opera internacionalmente mediante importaciones. Este primer contacto con los mercados exteriores les sirve para conocer el funcionamiento de estos procesos y descubrir el potencial que puede tener incorporar estrategias de internacionalización en sus modelos de negocio.
Etapa exportadora
Una vez la empresa descubre el funcionamiento de la estrategia multinacional, es el momento de dar el paso y vender su producto o servicio a otros países. Inicialmente, suele ser una operación a pequeña escala hasta valorar su rentabilidad, por lo que se basa en ventas esporádicas.
Etapa internacional
Una vez la empresa se ha adaptado al nuevo mercado, es el momento de abrir sucursales o delegaciones en las que vender su producto o servicio. Esta etapa implica una gran inversión tanto en infraestructura como en recursos humanos.
Etapa multinacional
A diferencia de la anterior, en la etapa multinacional se da un paso más allá con la creación de filiales de producción, aunque también llevan a cabo otras actividades de otras áreas funcionales. En estos casos, las filiales dependen de la matriz principal en cuanto a la toma de decisiones.
Etapa global
La etapa global es la fase más madura del proceso de internacionalización de una empresa, ya que esta pierde su nacionalidad para convertirse en global. Ya no depende de una matriz principal, sino que las actividades se llevan a cabo alrededor del mundo según las prioridades y decisiones que toma la propia empresa.
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Ventajas y desventajas de internacionalizar una empresa
Pese a que el mercado internacional puede ofrecer grandes oportunidades de expansión para las empresas, como toda estrategia, esta tiene sus ventajas e inconvenientes. Por ello, es importante valorar su impacto antes de implementarla.
Ventajas de internacionalización de una empresa
- Aumento de los beneficios diversificando la productividad en otros mercados.
- Optimización del coste de producción deslocalizando las cadenas de la pyme para aprovechar los recursos que ofrecen las empresas locales.
- Conocimiento de los mercados extranjeros como ventaja competitiva para entender mejor los consumidores y competidores.
- Aumento del valor de la empresa gracias al refuerzo positivo de la imagen y la marca.
- Atracción de nuevos inversores y fuentes de empleo, generando alianzas con otras empresas locales y profesionales del sector.
Desventajas de internacionalización de una empresa
- Proceso complejo que implica una gran inversión.
- Limitaciones geográficas, políticas y económicas particulares de cada país y mercado.
- El retorno de la inversión no se verá de inmediato, ya que es un proceso largo que implica muchos gastos.
- El proceso logístico se complica al ampliarse la distancia y operar en países que se rigen por otras legislaciones.
Internacionalización de empresas ejemplos
Ahora que ya conoces en qué consiste la internacionalización de empresas, es el momento de ver algunos casos de éxito:
- ALSA. Con presencia en países como China, Alsa se ha consolidado en el mercado como uno de los operadores líderes en el sector de transporte de viajeros por carretera.
- Hawkers. Esta start-up española de gafas es todo un referente para las e-commerce y su internacionalización gracias a su estrategia de marketing de influencers.
- Mango. La popular marca de ropa es también un ejemplo de internacionalización online. Nacida en Barcelona ya cuenta con presencia en Taiwán, Singapur y Sudáfrica, entre otros países.
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